Jesús el Mikael nos enseña
sobre lo que encierra El Don de la Gracia.
La GRACIA, es Vencedora de la
Ley, dejando establecida la RECTITUD, para gozar de la libertad sin ser
obstaculizado el HACER del Hombre, ni ser acusado ni castigado. Por lo tanto, no
debes dar ni un solo paso en la Vida sin meditar ni discernir, si así lo
hicieres es un hecho que no tendrás de
que lamentarte.
Tanto la ley como la Gracia
son dos Ideas del Hombre. Mientras se te muestran como Palabras es imposible
comprender la Acción constructiva de la una, como la actitud hostil de la otra. La Ley como acusadora cumple su Obra; la Gracia como Redentora también la
cumple.
La Ley por su postulado de
castigar ya de hecho es atentadora contra la dignidad del Hombre.
Es un hecho que la GRACIA es
Redentora y a la vez Salva del Oprobio al Hombre.
La Ley siempre condena; la GRACIA
en cambio es absolutoria y está siempre dispuesta a perdonar.
La Ley condena aún en el
Nombre de la Justicia y hace reos a inocentes y culpables, por lo que resulta
injusta, lo cual quedó comprobado con la condenación del Hombre Perfecto en la
cumbre del Calvario.
La Ley dice: El transgresor
morirá y la GRACIA afirma: Todo el que se arrepienta vivirá.
La Ley se impone por el
terror, la GRACIA por el Amor.
La Ley esclaviza haciendo
transgresores y pecadores. La GRACIA, Libera Redimiendo.
La Ley nulifica y persigue.
La GRACIA edifica y protege.
La Ley en el nombre de Dios,
cobra ojo por ojo, diente por diente. La GRACIA perdona al Ser arrepentido y
bendice al heridor.
La Ley, circunstancialmente,
llega hasta la condenación del Inocente. La GRACIA Redime de pena al
transgresor, si esa misma transgresión es inocente.
La Ley conduce a la
iniquidad. La GRACIA Conduce a la Santidad.
La Ley dice: ¡Crucifícale! Y la
GRACIA dice: ¡Sálvale!
La Ley condena al Justo y es
acusado. La GRACIA Perdona al injusto si pide clemencia y se arrepiente.
La Ley es Perversión. La GRACIA
es Perfección.
La Ley castiga y no puede
reparar su injusticia. La GRACIA Repara la falta y levanta al caído hasta darle
la Salvación por la PHE.
La Ley es degradación. La GRACIA
es Superación.
La paga del pecado es muerte.
La GRACIA dice: Aunque estéis muerto vivirás.
Vosotros sois a Imagen y Semejanza
del Sol Eterno. Esas palabras no las entendieron jamás sus discípulos y
seguidores. Ese conocimiento esparcido entre los muchos fue su Gran Obra
Redentora.
Jesús de Nazaret no murió en la cruz por vuestros pecados, como erróneamente
han manifestado sus seguidores; porque entonces el Justo se hubiese convertido
en Reo por la Humanidad y la Ley hubiese tenido justificación y no se habría rasgado
el velo del templo.
El fue condenado por sostener sus propios Principios: ¡Antes
de que Abraham fuese, Yo Soy…! Yo vengo del Padre, el cual, Uno es conmigo. Yo
Soy el CAMINO: (reconocerse Divino); la VERDAD: (Sabed que lo llena todo) y la
VIDA: (Sabed que es El Espíritu que todo lo mueve y lo renueva).
Bendice la GRACIA y ten PHE en
que tu Redentor vive Eternamente, mientras exista un HOMBRE sobre la tierra.
EL HIJO DEL HOMBRE
CÓSMICO
Maravillosas enseñanzas del Maestro Jesús
ResponderEliminar